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Reflexiones sobre la valentía y la micropolítica

12 Jun

Ayer mantuve una conversación con un amigo de esas que te hacen reflexionar y dudar sobre tus propios posicionamientos.

Le animé a participar activamente y militar en algún partido político. Yo siempre con mi “tema” 🙂 Y su respuesta es la que me hizo ver la realidad de una manera más compleja. Su respuesta fue un “NO” rotundo, aunque ya conociéndole no me sorprendió. Como dato para entender la historia recalco que mi amigo es español afrodescendiente

No es una persona desinteresada por la política en general, ni que no tenga ideas claras de qué es lo quiere, simplemente me dijo que no estaba dispuesto a arriesgar su vida y estar en la palestra para recibir ataques de la “extrema derecha” por un país que no se lo merecía. 

Mi respuesta inmediata fue llamarle cobarde y a continuación le puse sobre la mesa ejemplos de personas afrodescendientes que a pesar de tener muchos obstáculos en contra, sí han arriesgado para cambiar la sociedad y las leyes, y ahí están, luchando por sus derechos, por los de su familia, por los de otros que sufren discriminación y violencia. levantando la voz por los que no pueden, por los que tienen miedo.

Cobarde es todo lo que pude llamarle. Aunque entendí bien sus razones. A pesar de ver cómo es su vida hoy y de encontrar siempre una sonrisa amable y feliz en su cara, seguramente se haya encontrado en el camino muchas más piedras que yo. Como él bien me dijo, «no puedes saberlo, te lo imaginas».

Y pensando en esa palabra tan fea que le atribuí, “cobarde”, pensé en realidad cómo era él. Quizá no quiera complicarse la vida teniendo una proyección pública enfrascada en luchas políticas, pero es verdad que la participación política no existe sólo en una única dirección. La participación política existe en muchos ámbitos de nuestra vida. En la cultura, en las relaciones personales, en el ocio, en el trabajo.

Las relaciones de poder se dan en diferentes espacios, y tienen diferentes códigos de comunicación.

Siempre tengo muy presente aquella teoría feminista de «lo personal es político» surgido en los años 60 durante la tercera ola del feminismo, y por cierto, muy unida al movimiento negro que teoriza acerca de las políticas de identidad en Estados Unidos, y al movimiento de descolonización en Europa.

Caí en la cuenta que mi amigo no era un cobarde en absoluto. Podía haber optado por ser una persona introvertida. Podía haber optado por relacionarse sólo con afrodescendientes y participar en entornos donde no cupiese el rechazo. Sin embargo conozco pocas personas como él, valientes de verdad. Siempre participando en el ámbito de la cultura desde hace años, cultura muy diversa por cierto.

Es uno de los hombres con la mente más abierta que conozco. Su ejemplo es de una persona que ha pasado por encima de todos los estereotipos, prejuicios, nunca le visto un rechazo hacia nadie diferente a él.

Es valiente porque a pesar de sus miedos se enfrenta a ellos. Es valiente porque en su trabajo sabe y se atreve a liderar. Es valiente porque no tiene miedo a la visibilidad pública. Es valiente porque no conozco a persona con más agenda privada y social que él, y con una red de contactos con gente tan diversa como personas en el mundo. Es valiente porque es firme en sus convicciones y no se calla lo que piensa. Es valiente porque muestra su afectividad sin complejos. Es valiente porque siempre consigue que todo el que le conozca le quiera.

La Política con mayúsculas no es sólo lo que se entiende coloquialmente como tal, no es el partidismo, no es lo institucional. La Política suele entenderse como la actividad de los que gobiernan o aspiran a gobernar los asuntos que afectan a la sociedad o a un país, pero a mi entender la Política va mucho más allá.

Existe también la micropolítica, la política cotidiana del día a día. Siempre lo diré, no hay mejor política que la que construimos todos los minutos de nuestra vida personal, con nuestro ejemplo, y siendo coherentes. Existe la micropolítica del cambio educativo, del que todas podemos aportar nuestro grano de arena, algunas más que otras, de manera positiva y/o negativa. Unas más conscientes que otras de nuestra propia influencia en los cambios, en la mentalidad.

En concreto, lmejor política contra el racismo, la xenofobia y por el respeto a la diversidad es la que hacemos en nuestra casa, en las escuelas, en el trabajo, en las actividades socioculturales, en el ocio, con nuestras amistades, superando prejuicios y consiguiendo derribar esos esquemas preconcebidos que la gente tiene acerca de un colectivo, de una persona, de una cultura, de unos rasgos físicos o ascendencia concretos.

 La micropolítica es la verdaderamente revolucionaria. No hace revoluciones en el término estricto, pero despierta conciencias.

Es la política que practican los que se niegan a sucumbir al odio, los que son insumisos a los que creen que las cosas tienen que ser como son. Es la política del teatro en la vida. Es la política de la creatividad, la política de los valientes que innovan en las relaciones con los demás. Es la política de la complicidad con los que se aburren con la monotonía, con la uniformidad, con las constricciones sociales. Es la política de los que a través de la generosidad contagian lo verdaderamente revolucionario en la población.

Una persona comprometida y que apoya la diversidad mediante gestos reales en su día a día y desde su propia vivencia no es un cobarde, es ya en sí mismo un héroe.

¡Aunque sigo diciendo que sería un buen representante público! 😉

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¿Qué es gobernar para ti?

12 Dic

El Ministro de Justicia, Gallardón, ha dicho en una entrevista que «gobernar es, a veces, repartir dolor». Así es como entiende la Política y su papel de representante público.

¿Qué os parece esta expresión?
¿Qué es para vosotras y vosotros GOBERNAR» en Política? 1. Cómo se hace en la actualidad y 2. Cuál es vuestro ideal.

Recopilaré vuestras respuestas en un segundo post para hacer un mapa sobre qué entendemos por «Gobernar«.

Igual le damos algunas ideas al Ministro y a otros líderes polític@s.

México: Presentan guía 2% y + Mujeres en la política

8 Dic

México: Presentan guía 2% y + Mujeres en la política – http://pulse.me/s/g4Ezu

Serie de lideresas de iKNOW Politics-Enfoque en Aída García Naranjo

6 Dic

Serie de lideresas de iKNOW Politics-Enfoque en Aída García Naranjo, exministra de la Mujer y Desarrollo Social del Perú – http://pulse.me/s/g2icy

Taller de Liderazgo Político de la Mujer

30 Nov

See on Scoop.itEl liderazgo se escribe con i

See on www.omnia.com.mx

Kenia debe descubrir el liderazgo de las mujeres

30 Nov

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Organizaciones de mujeres de Kenia esperan que las disposiciones sobre
igualdad de género en la nueva Constitución se traduzcan en una mayor
presencia femenina en el gobierno luego de los comicios del 4 de marzo
de 2013.
See on www.ipsnoticias.net

Conclusiones Foro Regional “Mujeres jóvenes, liderazgo y gobernabilidad: Compartiendo experiencias a nivel mundial”

29 Nov

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See on www.americalatinagenera.org

“Feminizar la política es el reto del siglo XXI”

21 Nov

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Epsy Campbell, exdiputada costarricense cree que debe prevalecer siempre lo colectivo…
See on sociedad.elpais.com

El Comité Central incorpora a dos mujeres por primera vez desde la muerte de Mao Zedong

16 Nov

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Publico.esEl Comité Central incorpora a dos mujeres por primera vez desde …Europa PressEl Comité Central del Politburó del Partido Comunista Chino (PCCh) contará entre sus 25 miembros con dos mujeres por primera vez desde la muerte de Mao Zedong…
See on www.europapress.es

Hablando de liderazgo femenino

25 Oct

En los últimos años están proliferando las teorías, estudios, los planes de formación, proyectos de coaching sobre el Liderazgo, en especial sobre el nuevo modelo de “Liderazgo transformacional” y el  “liderazgo femenino”.

Un ejemplo simple del aumento de esta popularidad en cuanto al término “liderazgo femenino”: en España, tan sólo en el buscador más popular de Internet, Google, existen en el momento de escribir este post 3.150.000 resultados indexados en él, si buscamos este término.

Esta popularidad está motivada en gran parte por los años de grandes turbulencias económicas y sociales que se están produciendo en el mundo occidental, que hace repensar las relaciones en la empresa, la inclusión de las mujeres en la política, en los negocios, en los escalones directivos en general, para así atraer nuevo talento, aún no aprovechado al 100%, y que puede traer consigo maneras innovadoras de resolver los actuales problemas sociales, políticos, éticos, económicos y de producir cambios importantes en estructuras de poder, laborales y de producción. Algunos y algunas intelectuales consideran las últimas décadas la época «dorada» del liderazgo de mujeres en política y empresarias/emprendedoras en Occidente. Un claro ejemplo de liderazgo femenino, que hizo que este  concepto alcanzara  su mayor popularidad, fue la chilena Michelle Bachelet, expresidenta de Chile y actual directora ejecutiva de ONU Mujeres (después de un Gobierno de cuatro años que no estuvo exento de graves conflictos, Bachelet dejó la presidencia en marzo de 2010 con un 84% de popularidad).

Gracias a su ascenso como líder y a su diferente forma de dirigir, y sobre todo por su perspectiva feminista, ayudó a introducir el desarrollo de los derechos de las mujeres en su agenda política con más fuerza y notoriedad, e hizo que el tema del «liderazgo femenino” instalará definitivamente el tema a nivel mundial.

 

En España nos encontramos con que desde 2004 al 2011 se convirtió en unos de los países con mayor esfuerzo y pioneros en el ámbito de la Igualdad entre hombres y mujeres, impulsando una serie de leyes, planes y gestos políticos desde el Gobierno para impulsar la igualdad efectiva entre hombres y mujeres y el mayor liderazgo de estas últimas en todos los aspectos de la vida. Con mayores y menores aciertos, y con algunos desaciertos. España se encontraba por entonces entre los 10 países con mayor igualdad de género. Actualmente, hemos retrocedido 14 puestos según el índice sobre igualdad de género que elabora anualmente el Fondo Económico Mundial (WEF por sus siglas en inglés) para evaluar a los países en función del grado de equilibrio social que han conseguido entre sexos. En 2012 España ocupa el número 26.

 

Todo ello, hasta el momento ha fomentado una mayor visibilidad del liderazgo de las mujeres, que aún hoy no es suficiente por diferentes razones, que analizaré más adelante.

 

Pero muchas y muchos os estaréis preguntando qué es eso del “liderazgo femenino”.

 

Si revisaramos la producción científica producida en España nos encontríamos con algunas empresas y universidades que ofrecen estudios específicos de “liderazgo femenino”. En concreto, y tras revisar algunos, he podido observar que la mayoría no ofrece nada diferente a los estudios sobre comunicación, dirección y gestión de empresas y liderazgo en general, la única diferencia es que sólo se ofrecen a mujeres.

Eso es lo que entienden por liderazgo femenino por lo general, cambiar de sexo al público a quienes van dirigidos los estudios, estudios tradicionales creados por hombres, desde la perspectiva de un hombre, enfocados a los problemas y estilos de vida de los hombres, y en muchos casos que no contemplan la diversidad ni la inclusión. Eso para mí no es liderazgo femenino.

 

Hay múltiples interpretaciones de lo que es el liderazgo femenino. Unos lo entienden por el liderazgo ejercido por mujeres en general, independientemente de sus características y del perfil; otros hablan de cómo debe ser una mujer líder, según estereotipos femeninos, patriarcales y sexistas; y otros hablan de un tipo de liderazgo que se le reconoce como femenino por abarcar cualidades y habilidades más comunes en las mujeres, o bien por razones biológicas o por razones de socialización (según la ideología adoptada), y que es el ideal para dirigir organizaciones públicas y privadas, y que todo líder, ya sea varón o mujer, deberían tener o alcanzar; también se le relaciona con otro tipo de liderazgo actual conocido como liderazgo compartido.

Me gustaría aclarar algunos aspectos al respecto:

 

  • liderazgo femenino no es lo mismo que el  liderazgo de mujeres. Es un tipo de liderazgo que se corresponde con lo que la sociedad en general entiende por los estereotipos de género que se deberían corresponder con la forma de ser y estar de las mujeres. Ni todas las mujeres ejercen este tipo de liderazgo, y también los hombres pueden ejercerlo.
  • Para mí, es el tipo de liderazgo que todo hombre y mujer debe ejercer en una organización, en un equipo, en su vida personal, ante cualquier proyecto.
  • Por otro lado, podemos entender el liderazgo femenino como el impulso para potenciar el número de mujeres que ejercen el poder en diferentes áreas públicas y privadas. Estaríamos entrando en la cuestión del empoderamiento de las mujeres.

El proceso de empoderamiento

El proceso que habilita a alguien a ganar poder, autoridad e influencia sobre otros, las instituciones o la sociedad. El empoderamiento probablemente se constituye por la totalidad de las siguientes capacidades:

 

  • Tener poder de decisión propio.
  • Tener acceso a la información y los recursos para tomar una decisión apropiada.
  • Tener una gama de opciones de donde escoger.
  • Habilidad para ejercer asertividad en toma de decisiones colectivas.
  • Tener un pensamiento positivo y la habilidad para hacer cambios.
  • Habilidad para aprender y para mejorar su propio poder personal o de grupo.
  • Habilidad para cambiar las percepciones por medios democráticos.
  • Mejorar la auto imagen y superar la estigmatización.
  • Involucrarse en un proceso autoiniciado de crecimiento y cambios continuo sin parar.

Así pues en este blog partiremos de la definición de “liderazgo femenino” como:

  •  Al igual que cualquier liderazgo, se construye y se aprende. El liderazgo tiene que ver con el poder y con la cultura. No es nada natural. Al igual que la construcción del “género”.
     
  • El “liderazgo femenino” existe y hay una diferencia de liderazgo según el género. Pero estas diferencias no tienen nada que ver con una naturaleza especial de las mujeres, ni con la biología, sino con los diferentes procesos de socialización de mujeres y hombres a lo largo de la vida y la conformación de estereotipos y roles de género.
     
  • Por tanto, el “liderazgo femenino” es un liderazgo que tiene que ver con el género y no con el sexo, y que pueden ejercer tanto hombres como mujeres.
     
  • “El liderazgo femenino” tal y como se definen las cualidades y habilidades femeninas, según los estereotipos, se corresponde con el liderazgo transformacional.
     
  • La conciliación y la corresponsabilidad es una variable fundamental a considerar en el ejercicio de “liderazgo femenino”.
     
  • El liderazgo requiere experiencia y práctica  activa, así como exploración y desarrollos internos. Por tanto, el mentorazgo en mujeres es fundamental para “darse permiso”, y no temer el poder y competir en condiciones de igualdad con los hombres.

Sobre el empoderamiento del liderazgo de las mujeres, se ha hecho mucho hincapié en lo numérico, la lucha feminista por las coutas de poder, la paridad y las listas cremallera. Sin embargo, no nos podemos quedar sólo en lo numérico. Hay que ir mucho más allá. Hay que ir a lo cualitativo también.

 

Durante la campaña interna para ser Secretario o Secretaria General  del PSOE, Rubalcaba planteó en su proyecto atraer más militancia de mujeres, (El porcentaje de militantes en relación al sexo es de un 65,1 % hombres y un 34,9 % mujeres) 
Apoyó firmemente la paridad en las listas, de hecho tuvo que intervenir en medio de un conflicto porque algunas listas
electorales socialistas no cumplían esta premisa. Su máxima 
era que si el psoe se debe parecer a la sociedad española, y esta está compuesta por porcentajes similares de mujeres y 
hombres, el PSOE debía tener, no sólo en sus listas y sus 
cargos, sino también en su base y en el número de afiliados y afiliadas la misma paridad.
 

Viendo este ejemplo, me lleva a reflexionar que no sólo nos podemos quedarnos en la paridad en los órganos de representación, sino que hay varios obstáculos para atraer en mayor número a las mujeres al poder y a la participación política y social, sobre todo política, y más aún cuando se trata de altos cargos del tipo que sea (sin olvidar los grandes avances que se han producido) y que es necesario preguntarse por qué.

 

Algunos ítems que pueden influir:

  •  por un lado, la ya conocida falta de políticas y medidas de conciliación y corresponsabilidad en en mundo laboral, y en las organizaciones políticas y sociales.
 
  • Los diferentes modelos de socialización de niños y niñas que alejan a las mujeres de la espera pública y el poder. Ellos son incentivados desde los primeros años a opinar, hablar en público, ser activos, liderar proyectos y su propia vida, nosotras somos incentivadas para ser pasivas, sumisas, no expresar nuestra opinión y a rechazar el poder.
 
  • Cuestiones derivadas de la excesiva preocupación por el físico y la apariencia que se le presupone a una mujer.
 
  • Esto deriva en falta de autoestima para ser firmes en un debate, no temer a ponerse ante una cámara ni a exponerse a la opinión pública.
 
  • la incomodidad de la mayoría de las mujeres con un poder con valores mayoritariamente » masculinos» y con los que no se sienten agusto.
 
  • La falta de mentorazgo de otras mujeres en las que se puedan sentir identificadas y ser tomadas como modelos por otras mujeres.
 
  • La falta de formación en habilidades sociales y de comunicación que hacen que puedan ejercer un liderazgo con mayor autoestima fortaleza.

¿Qué podemos hacer para atraer más mujeres al poder, que estén mejor preparadas para ejercerlo, y que tengan mayor seguridad en sí mismas?

 

  • Cambiar el modelo de relaciones dentro los partidos y otras organizaciones.

  • Formación específica que fomente el empoderamiento de las mujeres. Algunos ejemplos: este máster de liderazgofemenino.com en Barcelona, o la que imparten algunas organizaciones de mujeres, o la que llevó cabo la Secretaría de Igualdad del PSOE para sus militantes en 2007 a través de la Jaime Vera.

  • Impartir formación sobre gestión, dirección, comunicación y liderazgo desde la perspectiva feminista o perspectiva de género tanto para hombres como mujeres.

 

  • Por un lado, es necesario reconocer factores psicológicos como el “miedo”, la falta de autoestima:

“la manera femenina de estar en el mundo está marcada por el miedo a no ser queridas, y ese miedo a no ser aceptadas convierte a las mujeres en sumisas, les impide ejercitar sus talentos y provoca una actitud que envía al entorno un mensaje de búsqueda de protección, se infantiliza”.(Carmen García Ribas).

Aquí sólo dejo algunas pinceladas que se irán desarrollando a lo largo del blog. Siento ser tan esquemática y no entrar en materia, pero son muchos temas que no se pueden tocar en un solo post.

 

Este blog pretende ser un espacio de reflexión sobre “el liderazgo femenino” tal y como lo he definido, fomentar el debate al respecto, aportar y compartir guías, material, consejos, etc. que puedan ayudar a organizaciones, empresas, partidos, a mujeres y hombres en este difícil pero interesante camino.

 

Por ello, he dividido el blog en noticias relacionadas con el liderazgo femenino y que proceden de otras fuentes, recursos y guías, mis propios artículos, y más adelante habrá una sección de entrevistas e historias de vida que espero que os resulten útiles e interesantes.

 

Gracias por leerme, y a las y los que aportéis un trozo de vosotr@s en este post y en todo el blog mi más humilde bienvenida.

A las personas que creéis en esto de que otro liderazgo es posible, y que creéis en el potencial del liderazgo de las mujeres y peleáis día a día por fomentarlo, compartirlo y conseguir que crezca, mi eterna gratitud.

Alguna información interesante:

Principio para el empoderamiento de las mujeres. UNIFEM

Empoderamiento. Mujeres en Red.

Empoderamiento. Wikipedia.

Liderazgo y Participación. ONU Mujer.

Mapa Conceptual de Liderazgo Político de Mujeres en los Gobiernos Locales. ONU Mujer.

Recetas de mujeres para la práctica política. Fundación Jaime Vera.

http://www.lifeschool.es/